Reabro el post sólo para agregar una aclaración, ya que puede haber lugar para confusiones. La temperatura de color de una fuente luminosa se refiere a su composición espectral, o sea a los colores que emite y sus intensidades relativas. Las diversas temperaturas de color de diversos focos llevaron a clasificar a su luz con adjetivos como "fría", "cálida", etc. Pero eso no tiene ninguna relación con la temperatura que adquiere la lámpara en sí, y (en principio) tampoco con la capacidad de calentar objetos circundantes. Dicho ésto, y sin entrar en análisis teóricos, una lámpara incandescente (incandescencia en sólidos) presenta un espectro acampanado de muy baja temperatura de color y emite la mayor parte de la energía en la región de los infrarrojos. Estrictamente hablando y según la teoría ondulatoria de la luz, se trata de una luz ultrafría. Pero comercialmente se usa un criterio inverso, que llama luz fría a la de mayor temperatura de color (luz azulada) porque el hielo es frío y el mar es frío y ambos son azules y dan idea de "frío". Así, también se le suele llamar "luz cálida" a la luz rojiza aunque sea de menor temperatura de color, por la simple razón de que el fuego es normalmente rojizo o anaranjado y representa la calidez. En nuestro caso específico, ese foco LED no te quema la cabeza porque es de mayor eficiencia energética (rendimiento). El antiguo foco incandescente te calentaba la cabeza porque es de muy bajo rendimiento (o sea, transforma una gran parte de la energía recibida en calor porque es poco eficiente).
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